Un ecosistema es el sistema formado por todas las comunidades naturales o conjuntos de organismos que viven juntos e interaccionan entre sí relacionados íntimamente con su respectivo ambiente. El ecosistema natural abarca los ecosistemas de los continentes, islas del mundo, y comprende una serie de sistemas de interacción abierta que incluye formas vivas como animales, plantas, mares y microorganismos, así como su ambiente abiótico: suelos, formaciones geológicas y constituyentes atmosféricos, lo mismo que sus actividades, interrelaciones, reacciones químicas, cambios físicos y demás fenómenos de cada uno.
El organismo es la unidad más fundamental de la ecología, el sistema ecológico elemental. Ninguna unidad más pequeña en biología, como órgano, célula o molécula, tiene una vida separada en el ambiente.
En el curso de sus vidas, los organismos transforman la energía y procesan los materiales a medida que metabolizan, crecen y se reproducen. Al hacerlo, modifican las condiciones del ambiente y la cantidad de recursos disponibles para otros organismos y contribuyen a los flujos de energía y al reciclado de elementos en el mundo natural. Grupos de organismos con sus ambientes físicos y químicos constituyen un ecosistema.
Los ecosistemas son sistemas ecológicos inmensamente grandes y complejos, que incluyen hasta muchos miles de diferentes tipos de organismos que viven en gran variedad de entornos individuales. Podemos hablar de un ecosistema forestal, un ecosistema de pradera y un ecosistema estuárico como unidades definidas porque ocurre relativamente poco intercambio de energía o sustancias entre estas unidades en comparación con las innumerables transformaciones que transcurren dentro de cada una de ellas. No obstante, finalmente todos los ecosistemas se encuentran relacionados en una sola biosfera que incluye todos los ambientes y los organismos en la superficie de la tierra. Las partes más alejadas de la biosfera están relacionadas entre sí por la energía y los nutrientes transportados por las corrientes de viento y agua y los movimientos de los organismos.
El agua que corre desde la naciente de un río hasta un estuario conecta los ecosistemas terrestres y acuáticos de la cuenca a los del ámbito marino. Las migraciones de ballenas grises conectan los ecosistemas del mar de Bering y el golfo de California. La importancia del movimiento de materiales entre ecosistemas de la biosfera está acentuada por las consecuencias globales de las actividades humanas.
Fuente: www.ambientum.com